Convenio Regulador de divorcio. ¿Qué tipo de acuerdos existen?

Dependiendo de si existen o no hijos, fruto de la relación sentimental entre ambos miembros de la pareja, siempre es preferible un procedimiento de mutuo acuerdo a uno contencioso.

Básicamente porque ante un divorcio de mutuo acuerdo ambas partes negocian, pactan y estipulan las condiciones a establecer después de la ruptura. Estas estipulaciones o pactos, podrán ser más o menos favorables para los miembros de la pareja, pero ante todo, se respetará su voluntad y su decisión, siempre y cuando esta no establezca condiciones o regulaciones contrarias a la ley.

Por lo tanto, siempre es preferible anteponer las voluntades de ambos, a la decisión que adopte un tercer regulador, en este caso un juez. Ya que por mucho que conozca la casuística y la problemática familiar, éste no será mayor conocedor sobre las características y detalles concretos de los miembros de la pareja. 

¿Cuándo será aconsejable un procedimiento de divorcio de mutuo acuerdo?

Cuando se efectúa un divorcio de mutuo acuerdo, siempre se deberá de procurar que en el convenio regulador, que no es más que el documento donde se recogen los pactos a los que llegan las partes, se contengan acuerdos que si en un futuro no se cumplen de forma voluntaria por el otro sean ejecutables judicialmente y no queden en papel mojado. Es decir, que podamos acudir al juzgado y que allí el Juez, con un procedimiento relativamente simple, pueda obligar al otro al cumplimiento de lo pactado. Sino de nada nos servirá lo acordado.

Deben ser pactos que recojan obligaciones concretas, claras y específicas. Un ejemplo nos servirá. Resulta totalmente inefectiva la muy utilizada fórmula del tipo:

“los objetos y muebles de la vivienda familiar se repartirán al 50% entre ambos consortes.”

Ahí no se está determinando una concreta obligación de entrega de nada. Por lo tanto, si el otro no cumple en darme lo que yo quiero, aunque los dos sepamos lo que es, no podré pedirle al Juez que le obligue a cumplir lo que se ajusta a mis intereses. Por lo que será necesario esclarecer con exactitud el contenido del convenio, para regular este tipo de pacto de la mejor forma posible.

¿Es necesario contratar a un abogado en un procedimiento de mutuo acuerdo?

Por todo esto, es necesario contactar con un despacho de abogados expertos en todo tipo de divorcios, ya que serán sus abogados especialistas, los que redactarán y asesorarán en las diferentes cláusulas que podemos incluir, regular en un convenio regulador de divorcio.

Como hemos explicado anteriormente, no solamente se trata que el profesional redacte e incluya todas las cláusulas necesarias adaptadas a la casuística de cada familia, sino que será necesario que dichas cláusulas sean facilmente ejecutables y no originen problemas de interpretación futuros, en conclusión que las mismas sean claras y fáciles de interpretar.

¿Qué es un divorcio contencioso?

Por otro lado, también existe la figura del divorcio contencioso. En este tipo de procedimiento, básicamente las dos partes litigan entre sí, con la idea de hacer valer sus pretensiones individuales ante un tribunal, en el cual, conjuntamente con la figura de fiscalía siempre y cuando existan menores de edad, el juez decidirá el mejor convenio regulador que se deba de fijar según las caracterísiticas familiares de los litigantes, su economía, su jornada laboral, etc. 

Ante un proceso de divorcio contencioso, es necesario preparar una buena estrategia de defensa, para poder exponer ante el juez porque las pretensiones de dicho cliente se tienen que hacer cumplir en comparación a las pretensiones de la otra parte. Por todo ello, será necesario en muchos casos analizar las jornadas laborales de los representados, sus ingresos mensuales, su disponiblidad horaria y toda una serie de documentación para poder garantizar una idonéa defensa, tanto en el aspecto social como patrimonial del cliente.

¿Es obligatorio efectuar un juicio en un procedimiento de divorcio contencioso?

Cabe añadir, que en este procedimiento contencioso será obligatorio la realización de un juicio, para defender y exponer ante su señoría las pretensiones concretas, en cambio en un procedimiento amistoso de mutuo acuerdo, no será necesaria la celebración de una vista judicial. Por eso, un procedimiento contencioso tiende a ser más largo en el tiempo y a demorarse durante mucho más tiempo, ya que las fases judiciales a desarrollar serán mayores que las de un procedimiento de mutuo acuerdo.

En cambio, un procedimiento de muto acuerdo, por norma general siempre es mucho más rápido, ya que las partes con la ayuda de un profesional del derecho, presentan directamente al juzgado competente la versión del convenio regulador adaptado y pactado por la pareja que desea divorciarse, así como la respectiva demanda judicial de divorcio de mutuo acuerdo. 

Se recomienda contactar con profesionales con experiencia en convenios reguladores

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Es necesario contar con el asesoramiento de abogados especialistas para redactar un convenio regulador de divorcio, con el objetivo de negociar las cláusulas del convenio y de proteger sus intereses según sus necesidades familiares.